Los combatientes caídos en la Guerra

Categoría: Armada (Page 22 of 40)

Carlos Angel González

Un cacho de buena persona

Por: Emilia Iturrarte.

“Regresó a despedirse unos días antes del hundimiento, pero no sabía que iban a estar cerca de Malvinas. A ellos le habían dicho que estarían en el sur del país, a la espera de lo que pudiese pasar en la continuidad de la guerra”, expresó su hermano menor Raúl Urbina.

Carlos Ángel González nació en Rosario el 17 de enero de 1962. A los 5 años se mudó a Villa General Savio, en el partido bonaerense de Ramallo. Su mamá se llamaba Ercilina Schroeder y su papá Ramiro González, quien falleció cuando “Cachito” tenía menos de 2 años.

Cursó los estudios secundarios de forma parcial en la Escuela Técnica N°2 de la ciudad de San Nicolás. A los 18 salió sorteado para hacer el Servicio Militar Obligatorio y su destino fue Puerto Belgrano, en la ciudad de Bahía Blanca.

“Cachito” era de físico pequeño, menudo y con una personalidad introvertida. Quienes lo conocieron aseguran que su virtud era ser buena persona. Le gustaba pasar el tiempo con su familia, jugar a la pelota y era hincha de River Plate. Tenía un sueño: casarse con Elba, el amor de su vida, apenas regresara de la guerra. Tenía otro sueño: formar una familia con ella.

Su hermano Raúl recuerda hasta hoy cuando se enteró del hundimiento del ARA General Belgrano: “En la noche del 3 de mayo, mientras miraba una película por televisión, lo dieron en un flash informativo. Ahí les avisé a mis padres. De su muerte nos enteramos días después y viajamos a la Base Naval donde estaba haciendo el Servicio Militar. Nos entregaron la ropa que había dejado en tierra firme antes de partir al sur”.

Alguna vez un testigo le contó a sus seres queridos que su fallecimiento fue en el momento del hundimiento. Carlos se encontraba donde pegó el primer torpedo y su muerte habría sido instantánea. “Carlos Ángel fue uno de los 323 soldados fallecidos en ese crimen de guerra y su cuerpo nunca fue recuperado”, dice Raúl, su hermano, con la memoria activa.

Mario Luis González

Una vida de riesgos

Por: Manuel Massa.

“Cuando el crucero A.R.A. General Belgrano fue torpedeado por el submarino inglés y antes de hundirse, Mario salió con vida del barco y abordó una balsa salvavidas que estaba sobrecargada de soldados. En esa circunstancia vio el riesgo de hundirse y como flotaba otra balsa muy cerca, con menos soldados, decidió saltar. En ese momento las olas apartaron los flotadores, lo que ocasionó que Mario no pudiera trepar. Cayó en las frías aguas del mar y desapareció de forma inmediata”, comentó Américo González, hermano de Mario.

Cenotafio en memoria de González

Tenía 34 años cuando fue a la guerra de Malvinas. Era suboficial. Estaba casado con María Julia Sandoval, con quien tuvo tres hijos. Vivían en Punta Alta, Buenos Aires, muy alejado del pequeño pueblo en Tucumán donde había nacido: Atahona, de tan solo 400 habitantes según el último censo en 2010.

En mayo del 2020 se le hizo un homenaje en su Atahona natal: hermanos e hijos de Mario fueron a recordarlo y a rezarle en la reciente construcción de su cenotafio.

Miguel Antonio González

De un pequeño pueblo, un gran héroe

Por: Federico Olivero.

Durante años, sus allegados no estuvieron seguros si quien yacía en el ataúd fuera él, debido a que el cajón llegó cerrado y así mismo enterrado. Recién a finales de 2021, el Equipo Argentino de Antropología Forense, a pedido de la familia, confirmó que los restos que en paz descansan pertenecen a Miguel Antonio González.

“Chalita”, como lo apodaban, nació el 24 de mayo de 1962 en Niogasta, Tucumán, pero es en Monteagudo -localidad más cercana- en donde más homenajes hay hacia él. Una de las calles principales y el complejo deportivo, en el que al soldado le gustaba jugar al fútbol, llevan su nombre.

Miguel A. González

En cuanto a su familia, de su padre nunca se supo nada, por lo que llevó el apellido de su madre, Candelaria del Carmen González. Ella tuvo seis hijos, y a una de las menores decidió nombrarla Malvina, en conmemoración a su hermano mayor.  “¿Cómo era él?, buenito”, dijo su mamá.

Miguel dejó la escuela tras haber terminado el primario en Monteagudo. Cuando iba a estudiar con sus hermanos, su madre los llevaba a caballo, ya que debían cruzar el río que separa a ambos pueblos. Sus compañeros en el colegio cuentan que era muy solidario y que lo querían mucho. En ese establecimiento también se realizan homenajes en su honor.

No pudo cumplir los 20 años. A un puñado de días, el 2 de mayo de 1982, lo encontró la muerte arriba del crucero ARA General Belgrano, junto a otros 22 soldados tucumanos. Con 18 años había sido reclutado por la colimba. Al momento de la guerra, en su casa ni siquiera estaban enterados, pero un día los llamaron para avisarles que su hijo había muerto.

Raúl Omar Gorordo

Una vida llena de golpes

Por: Agustín Pereira.

Corría el año 1968, en Bell Ville, ciudad al sudeste de la provincia de Córdoba. Un joven de sólo 16 años y una infancia sumamente difícil, decidía dejar su lugar de nacimiento para marcharse a Buenos Aires e ingresar en la Armada.

Raúl Gorordo nació el 9 de marzo de 1952 en Córdoba y era hijo de madre soltera. Tenía dos años cuando ella se fue a vivir a la capital del país y lo dejó al cuidado de su abuela, una señora ejemplar que le dio todo lo que tenía. Lo cuidó, lo crió y le dio el afecto que un chico necesita a esa edad. Con el paso del tiempo, Raúl fue creciendo y el sueño de ser un gran militar lo hizo radicarse solitariamente en Buenos Aires.

Tenía alrededor de 20 años cuando tomó otra decisión muy importante en su vida: regresar a su ciudad natal y casarse. El rechazo de su familia a esa determinación, hizo que se distanciara de sus seres más queridos. Fruto de la relación con su esposa tuvieron una hija.

Sin embargo, todo lo que vendría a partir del nacimiento, sería una película de terror. Su hija nació con problemas en sus pulmones y riñones. Luego, en abril de 1982, llegó la Guerra de Malvinas y Raúl fue a defender a la Argentina como cabo principal. Llegó la guerra y llegó su muerte. Y no fue la única: dos años después, también falleció su hija, a causa del deterioro en su salud.

Héctor Omar Gorosito

De electricista a héroe nacional

Por: Tomás Nahuel Portillo.

Desde chiquito Héctor Omar Gorosito mostró su pasión por la mecánica y los motores y un sueño principal: servir a la patria.

Nació en Saladillo, provincia de Buenos Aires y a los 3 años su familia se mudó a Avellaneda. La primaria la hizo en la escuela 28, de Quilmes, y el secundario en el Instituto Militar de la Aeronáutica (IMPA). En 1979 ingresó a la Armada donde estudió la carrera de técnico electricista y en pocos meses fue destinado al crucero ARA General Belgrano, en los alistamientos posteriores al conflicto limítrofe con Chile por el canal de Beagle.

“Era un chico de pocas palabras e introvertido, una increíble persona y muy servicial”, recuerda su prima Marita Rimolo. En 1982, antes de partir a la guerra, Héctor tuvo un último momento con su papá de nombre homónimo: “Papi, no vayas a cambiar, quiero que siempre seas como sos, como te conoce todo el mundo, cuidá a mamá y a mi hermana, que yo voy a una guerra”, recordó Héctor Gorosito en el libro “Calles y espacios públicos de Saladillo”. Su papá le pidió en vano que se quedara: le contestó que iría a defender su patria y que no le importaba si tenía que morir en el intento.

El 16 de abril zarpó en el Belgrano rumbo al Teatro de Operaciones del Atlántico Sur. Tras el hundimiento, sus papás buscaron incansablemente alguna noticia por oficinas y hospitales militares. Recibieron múltiples malos tratos y falta de respuestas hasta que varios días después unos oficiales se presentaron en su casa para informarles que su hijo nunca había regresado.

El recuerdo de Héctor se mantiene activo en su ciudad natal, donde cuenta con el título de Ciudadano Distinguido Post-Mortem y el nombre de una de sus calles. Además, en 2020, se estableció que el 3 de agosto, fecha de su nacimiento, es el “Día del Veterano de Guerra de Saladillo” para que nunca nadie pueda olvidar a Héctor Omar Gorosito.

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